Movilización independentista en apoyo de los acusados

Hasta las puertas del Tribunal Supremo se han trasladado representantes políticos y de la entidades soberanistas y familiares de los presos independentistas. Se concentran con una pancarta que reza "Decidir no es delito". Con ellos han estado el presidente de la Generalitat, Quim Torra, que sigue el juicio desde la sala y el presidente del Parlament, Roger Torrent, que no puede asistir como público ya que está citado en este proceso como testigo. Además están presentes algunos dirigentes del PDeCAT y ERC.

Protestan contra un juicio que consideran nunca debía celebrarse. Así lo ha manifestado el vicepresidente de Omnium cultural, Marcel Mauri. La presidenta de la otra entidad soberanista, la Asamblea Nacional Catalana, Elisenda Paluicie, denuncia que se trata de un juicio político. Asimismo, el presidente del Parlament, Roger Torrent, asegura que se enjuicia a unos hombres dignos que sólo han ejercido su derecho democrático.

Torra ha entrado en el Supremo escuchando gritos de golpista. No ha hecho hacer declaraciones a la prensa. Una vez dentro ha mantenido un breve encuentro con el presidente del Tribunal, Carlos Lesmes. Torra ha entrado por la puerta principal y el saludo responde a lo habitual con las autoridades públicas españolas que acuden al Palacio de Justicia en visita no institucional, han informado fuentes del alto tribunal.

En Barcelona, los CDR, los Comités de Defensa de la República, han cortado varias carreteras para protestar por este juicio. Especialmente afectada la circulación por la AP-7 y en algunas arterias de la capital, como la Gran Vía o la Avenida Diagonal. Además, han organizado barricadas con neumáticos, a la altura de Sant Celoni, provocando más de cinco kilómetros de retenciones. Unas protestas que se han repetido en varios puntos de la ciudad.