Adiestrados para alaertar de situaciones extremas
Perros de asistencia de la Fundación Canem
Pancho vive en Huelva con su dueño, Daniel. Le vigila día y noche y le avisa de que le está sobreviniendo una bajada o una subida de azúcar. Lo percibe, incluso, antes de que el propio Daniel se dé cuenta y eso le da mucha más seguridad en su vida.
Pancho es un perro de asistencia de la Fundación Canem, constituida en Zaragoza, y que está adiestrado para advertir y avisar, con suficiente antelación, que el nivel de azúcar de Daniel no es el adecuado.
En el año y medio que llevan juntos, Pancho se ha convertido en imprescindible en la vida del niño. Le acompaña al instituto, con los amigos o de campamento y, de noche, mientras Daniel duerme, su perro le vigila como una especie de ángel de la guarda.
Además de para personas con diabetes, la Fundación Canem adiestra a estos perros que alertan de la inminencia de un ataque epiléptico a quienes padecen de ellos.