Alba Heredia, como un huracán
Manuel Moreno, "El Pele", ha dejado huella de su particular visión del flamenco en la tercera gala del Festival Internacional del Cante de las Minas, por donde ha pasado como un huracán la bailaora Alba Heredia, que ha obtenido una de las mayores ovaciones de los últimos años en la Catedral del Cante.
Con su característica gorra y su moderna indumentaria, el cordobés ha estado acompañado de violín, dos guitarras, entre ellas la del Niño Seve, y dos coros, comenzando su actuación considerando un honor para todos los flamencos que siga existiendo una cosa tan maravillosa, en referencia al festival unionense.
"Voy a hacer una pequeña ensalada", ha continuado antes de empezar con la canción "Me duele el alma" o la elegía del poeta oriolano Miguel Hernández a Ramón Sijé, inmortalizada musicalmente por Joan Manuel Serrat.
La noche empezó con la granadina Alba Heredia, quien ha subido al escenario de la Catedral del Cante para presentar su espectáculo "Sentimiento en el alma", en el que ha estado acompañado por un cuadro formado por dos guitarristas, cuatro cantaores y un percusionista.
Cuatro años después de ganar en el Antiguo Mercado Público de La Unión el Premio Desplante en dura competencia con Amador Rojas, la oriunda del barrio del Sacromonte ha demostrado que es una digna heredera de la estirpe de los Maya, como Mario Maya, Curro Albaicín, Juan Andrés Maya o Manolete.
Ese origen es algo que transmite en su baile, que imprime en cada movimiento y en cada gesto de sus coreografías, con un arte y un compás implícito, además de estar caracterizado por su impulsividad, su espontaneidad y naturalidad.
A pesar de su juventud, con sólo 22 años la granadina ha cuajado una solvente actuación en la que ha demostrado su depurada técnica y ese pellizco gitano que transmite en el baile, pasando como un vendaval por las tablas unionenses.
