Cuando los vecinos de la pedanía de El Rigüelo se atrevieron a salir de casa, no pudieron ir muy lejos: el puente que llevaba a Casariche había quedado tan dañado que era imposible usarlo. Dos días después, Andalucía Directo ha comprobado que siguen prácticamente aislados.
Los niños de El Rigüelo llevan dos días sin poder ir a clase. Sus padres y vecinos tampoco pueden usar el puente porque sus cimientos se los llevó una furiosa crecida del río Yeguas. La única alternativa de que disponen unos y otros es utilizar un camino rural embarrado e inseguro durante 20 kilómetros, y apenas hay quien se haya atrevido.
Un equipo de Andalucía Directo sí lo ha hecho, para comprobar de primera mano la situación de estas personas.