El Defensor recibió el siguiente correo: “ Nos ponemos en contacto con ustedes como Asociación de enfermos de Síndrome de Ménière de España. Nuestra enfermedad, como sabrán, afecta al oído interno, y uno de sus síntomas es la pérdida de audición progresiva, hasta llegar, en muchos casos, a la sordera de forma irreversible.
A veces es posible paliarla con ayudas auditivas, audífono e implante, y otras veces, debido a las particularidades de nuestra enfermedad, no es posible. Y nos vemos inmersos en la imposibilidad de comunicarnos como hasta ahora lo hacíamos. Tenemos que aprender cosas nuevas, lectura de labios o lengua de signos, y usar herramientas que algunos no sabíamos ni que existían, “los subtítulos de la tele”. Queremos apelar a la buena voluntad y a la sensibilidad de quién esté leyendo este correo, para que haga llegar a quien corresponda nuestro mensaje, o bien que por favor nos indiquen a quien deberíamos dirigirnos.
Rogamos que se consideren los subtítulos como una parte muy importante de los programas, de todos. Entendemos que con la tecnología que hay hoy en día debe ser posible que los programas sean subtitulados en tiempo real, y correctamente, no con retrasos y con errores insufribles, que hacen que realmente nos desanimemos y tengamos que considerar que la televisión es un medio de comunicación poco accesible y poco sensible con las necesidades especiales. Los sordos necesitamos los subtítulos para estar informados y participar activamente de la sociedad audiovisual, no nos excluyan, por favor”.
El Defensor entiende que este mensaje no es una queja, si no una petición de información a todas las cadenas de televisión sobre el sistema de subtítulos, especialmente en el Canal 2, como se informó a este usuario. Se insistió en que, efectivamente, hay subtítulos automatizados, como los de Informativos, que pueden incurrir en error, pero que el resto de programación es subtitulado de acuerdo a estándares adecuados, según informó la Dirección de Emisiones.